Hoy en el Evangelio

Jesús nos habla de la fidelidad matrimonial (Mc. 10,1-12).La letra  de este canto, llamado "VEN, AMADA MÍA" está basada en el Cantar de los Cantares, y dice así:

"En la noche busqué al Amor de mi alma, en mi árido jardín Él hizo su morada; con perlas de rocío cubrió Él mi cabeza, mi alma está bella, mi Bienamado llega.

Ven, amada mía, ven a mi Jardín, el invierno ya pasó, y las viñas en flor exhalan su frecor; ven a mi Jardín.

"Habla mi Bienamado, atisba en la ventana; el fruto está maduro, mi alma está presta; espero su llamado pidiéndome abrir; arrulla la paloma, mi Bienamado llama.

Ven, amada mía..."